“Batalla de Fray Marcos. Brillante carga de la legión de lanceros
de Mariano Saravia contra las fuerzas del General Muñoz.”
Esta batalla se llevó a cabo en los campos del Teniente Coronel Ramón
Latorre, sobre el lomo de la cuchilla Chamizo.
Se peleó el 30 y 31 de enero de 1904.
La artillería del Gral. Muñoz al mando del valeroso Mayor Cuestas,
jefe de la misma, no pudo detener el ímpetu de la división de lanceros de
Mariano Saravia “quien a la cabeza de sus lanceros viene a “media rienda”
hacia donde está empantanado el cañón”.
Por el cañon pelearon y por el cañon se mataron, en un combate cuerpo
a cuerpo donde todas las heridas y muertes fueron producidas por puñal.
En el campo de batalla, quedó en poder de Saravia: 2 ametralladoras,
2 cañones canet y 17 carros con armas, municiones, ponchos y recados.

La historia a través de la foto, constituye una forma diferente de conocer, aprender y enseñar nuestro rico patrimonio cultural. Pensamos que tenemos la necesidad y obligación de rescatar, ordenar y publicar parte del archivo fotográfico que esta en nuestro poder, con el fin de sacar del anonimato un conjunto de fotos y preservarlas para generaciones venideras. Algunas fotos aquí publicadas son inéditas, otras ya conocidas y la presentación de las mismas no contienen un profundo recorrido cronológico y en su confección no se pensó en publicar un texto de historia sino en un conjunto de añejas fotos que nos introducirán en un mundo pasado pero muy latente, muy recordado, muy nostálgico y lleno de enseñanza. Queremos agradecer a todas aquellas personas, a todos aquellos amigos que, de una forma u otra nos han aportado datos y/o fotos referentes al tema publicado. Varias de las fotos aquí publicadas, fueron localizadas en la heroica ciudad de Paysandú y algunas de ellas fueron donadas por la Srta. Quintana que junto al padre Pías nos enseñaba catecismo en la “Capilla San Antonio” en Paysandú, allá por el año 1956-57, y cuyo hermano fue uno de los caídos en la cruenta epopeya de 1904. Esperamos que nuestros lectores reciban este humilde trabajo, con el mismo entusiasmo e interés que pusimos en la confección del mismo.

Lic. Antonio María Boero Ramiro Antonio
Boero Ruiz

Diego Luis de Gonzaga Lamas.
Militar uruguayo que nació en el departamento de Salto el 4 de Agosto de
1858, fué el compañero de Aparicio Saravia en la campaña de 1897.

General Juan Angel Golfarini.
Medico y Político que nació en Montevideo el 23 de junio de 1838
fué el presidente del comité de guerra revolucionario de 1897.

Saravia, Lamas y ayudantes, 1897.
Eusebio Odriozola (h), Nepomuceno Saravia, Juan Antonio Apolo, Luis Ponce de León,
Aparicio Saravia, Isaac Saravia, Diego Lamas, Luis A. de Herrera y Luis Pastoriza.

Coronel Torquato Severo.
Amigo de Saravia y compañero en la revolución federalista
de 1893 en Brasil.

Juan Bautista Idiarte Borda.
Durante su gobierno se inició la campaña de 1897.

Juan Lindolfo de los Reyes Cuestas.
Nació en Paysandu el 6 de enero de 1837, durante su gobierno
se firmó la paz en setiembre de 1897.

General Aparicio Saravia.
Jefe de las campañas de 1897 y 1904.
Herido de muerte por una bala misteriosa el 1° de setiembre de 1904,
falleció a consecuencia de la misma el 10 de setiembre del mismo año.

Teniente Coronel Adan Latorre.
Comandante del piquete de Aparicio Saravia en 1893.
En la foto podemos apreciar varios niños portando lanzas.

Gaspar Silveira Martins.
Ideólogo del federalismo riograndense.
Nació en el actual departamento de Cerro Largo.

Rafael Cabeda.
Compañero de Saravia en la revolución federalista brasileña de 1893,
también lo apoyó en la campaña de 1897.

Litografia del Coronel Diego Lamas en la Batalla de Cerros Blancos, mayo de 1897.
Por la orden general n°1 dada en Illescas, el Gral. Saravia expresaba lo siguiente:
Art. 1° “Reconózcase en el desempeño del cargo de Jefe del Estado Mayor
General del Ejército al Coronel Diego Lamas”.

Luis Alberto de Herrera en la campaña de 1897.
En “Tres Arboles”, entre los revolucionarios que cayeron, tambien murieron:
Valentín Galain, Manuel Durante y Rafael A. Pons, héroe de la defensa de
Paysandú 1864-65. En esta batalla se perdió la bandera que habia pertenecido a la
División de Guardias Nacionales de Paysandú en 1864-65, que estaba bajo el
mando del heróico Coronel don Emilio Raña y que habia sido regalada a Apolinario Velez
por Jacobo Berra para que la portara gloriosamente en la campaña de 1897.

Aparicio Saravia cuando joven.

Apolinario Velez.
Jefe revolucionario en 1897.

Antonio Floricio Saravia.
“Chiquito”
Cayó en “Arbolito”, el 19 de marzo de 1897, en una carga a lanza
contra los soldados del Regimiento n°3 de Caballería de Rivera y el
5° de Tacuarembó.

Infanteria en Montevideo.
La infanteria bordista en 1897 estaba bien preparada, equipada
y adiestrada. El fusil y carabina Remington,-armas esenciales del revolucionario-
de un solo tiro cal. 11 y 7 mm. ya estaba siendo desplazado del ejercito
nacional y en la foto podemos apreciar que los soldados portan el nuevo fusil Mauser
cal. 7mm. con sistema de repetición a cerrojo y autonomia de carga para
cinco tiros, el que superaba enormemente la capacidad de fuego del fusil y carabina Remington.

Quinto de Caballeria.
En 1904 antes de Masoller.
En la Revolución de 1897 formó en la vanguardia del Ejército del norte
siendo la primer unidad del ejército del General Villar que entró en
acción en la batalla de “Cerros Blancos”, el 14 de mayo de 1897, donde
murió el legendario y viejo comandante blanco Fortunato Jara, conocido
por el “Indio Jara”.

El Primero de Caballeria y baterias de artilleria ligera de campaña
rindiendo honores funebres al presidente constitucional Idiarte Borda
en el dia de su sepelio.

Regimiento de infantes en Montevideo.
En las inmediaciones de la antigua Intendencia del Ejército, estos
infantes pertrechados y armados a guerra estan prontos para partir al
interior.

25 de agosto de 1897.
Artilleria ligera de campaña, escolta presidencial y curiosos esperan los
inicios de los festejos del 25 de agosto.
Ese día sería el último para el presidente Idiarte Borda.

Teniente Gral. Eduardo Vazquez aguardando la llegada de las armas
entregadas por los revolucionarios que en su mayoría fueron: Winchester, Mauser 71,
carabina y fusil Remington, algunos Spencer, Mauser Daudeteau, y varias armas
de cargar por la boca.

Nacionalistas preparándose para reunirse en Pablo Páes, donde Saravia
pasó a revista a mas de 1000 hombres, y donde nació el Club Gral.
Gumersindo Saravia.

Toma de la Cañonera Artigas.
Litograbado en el cual podemos leer:
Abordaje y toma de la Cañonera Gral. Artigas, en la tarde del 15 del
actual mes (abril de 1897).
Esta cañoñera era uno de los mejores buques del presidente Idiarte Borda,
poseía cañones Krupp, cañones Nordenfield y dos ametralladoras Canard.

Funerales del Coronel Diego Lamas.
Nació el Cnel. Lamas el 4 de agosto de 1858 en el departamento de
Salto, y falleció el 20 de mayo de 1898 al caer del caballo en que
montaba. Fué el militar que le faltó a Saravia en la campaña de 1904.

José Pablo Torcuato Batlle y Ordoñez.
Presidente constitucional de la republica, 1903-1907 y 1911-1915.
Hijo del Gral. Lorenzo Batlle y Amalia Ordoñez, nació el 21 de mayo
de 1856 en Montevideo.

Coronel Gervasio Galarza
Jefe de la División Soriano.

Coronel Pablo Galarza
Militar de un valor a toda prueba, fué hombre de confianza del
presidente Batlle, quien lo ascendió a General de Brigada el 9 de
octubre de 1905.

Gral. Manuel Benavente
Comandante militar de Rocha, Minas y Maldonado en 1903.
Del 1° de abril al 15 de abril de 1904 fué el jefe del Ejército del
Norte.

Gauchos con pañuelos blancos y colorados de la “División 33” al mando
de Basilisio Saravia, hermano de Aparicio y afiliado al partido colorado,
y a quien el presidente Batlle le otorgó el 25 de noviembre de 1904, el
grado de Coronel del Ejército Nacional.

Levas en la ciudad de Montevideo.
El Ejército recurrió a las levas para reforzar sus cuerpos de línea.
Las personas que vemos en las tomas -muy bien vestidas- eran agarradas en las noches
y obligadas a incorporarse al ejército nacional.

Capitán Constante Candela(Blanco), sanducero, hombre de coraje
y valentía que actuó en el año 1897 como oficial en la
División Paysandú y en el año 1904 como segundo jefe del
escuadrón de caballería “Lucas Piriz”.

Coronel Basilisio Saravia
El hermano colorado del General Aparicio Saravia.

Coronel Juan José Muñoz
Jefe de la División Maldonado.

Luis Leal, Aparicio Saravia(hijo) y Pancho Oribe.

Presidente Batlle en Paysandú, hospedándose en el hotel Paris situado en las
actuales calles L. Gómez esquina 33 Orientales, el 27 de setiembre de 1903.

Batlle en su primer día como presidente de la republica, marzo de 1903.

Batlle en la exposición feria de Paysandú, setiembre de 1903.

Homenaje del pueblo sanducero al presidente Batlle en su llegada a
Paysandú, setiembre de 1903.

Cuartel de Infanteria en Paysandú. Hoy dia
Jefatura de Policia.

Carreta llegando a Paysandú transportando heridos de la batalla de
Masoller.

Javier de Viana
Revolucionario, escritor y autor de “Con divisa blanca”.

Ejército del Norte al mando de Vazquez pasando por Paysandú antes de
Masoller, agosto de 1904.

Formación de la Guardia Nacional de Paysandú, marzo de 1904.

Infanteria del Ejército Nacional que desembarcando en el puerto
de Paysandú, provenientes de Montevideo, se dirigen al cuartel, con el
fin de defender la ciudad ante un posible ataque del Gral. Saravia, julio 1904.

Llegada de tropas a Paysandú, agosto de 1904.

Revolucionarios nacionalistas acampando en Sayago, tranquilos, bien
montados y a la espera de órdenes.

“División Salto”
Infanteria revolucionaria en campos del departamento de Salto.
La mayoria de ellos portan carabina y fusil Remington, junio de 1904.

Fuerzas revolucionarias en Rivera, bien armadas y prontas para pelear.
Los cañones y las ametralladoras fueron tomadas al Ejército en
Fray Marcos.

General Aparicio Saravia.
El “Aguila Blanca”, al salir de Melo, 21 de marzo 1903

Saravia y Diego Lamas en 1897.

Saravia y parte de su Cuartel General (1904)
Fernando Guerrero, Alberto Muñoz, Abelardo Apolo, Armando Apolo,
Germán Ponce de León, Aparicio Saravia, Luis Ponce de León, Abel Sierra,
Ramón Saravia, Mauro Saravia, Antonio Amestoy, Lidoro Pereira, Rodolfo
Ponce de León y Ramón T. Mercader.

División Paysandú.
Fuerzas del Ejercito colorado trasladada desde Paysandú para defender
Montevideo ante un posible ataque de las tropas del General Saravia.

Artilleria del Ejército Nacional.
Al mando del Teniente Coronel Domingo Ramasso, con piezas Canet, esta
misma unidad participó en la batalla de Masoller desplegando todo su poder de fuego
en el lugar conocido como el “Cerro de los Cachorros”. A la retaguardia de la artilleria
quedó de reserva el batallón 1° de policía al mando del Tte. Coronel Guillermo West.

Regimiento 5° de Artilleria, antes de Masoller.
Detrás infantes prontos para entrar en combate.
El poder de fuego de la artilleria comprobó la importancia de esta Arma
en el combate. Delante de los infantes podemos apreciar las primeras
instalaciones de lineas telegráficas.

Infantes de la División 33, a la entrada de la
ciudad de Montevideo. Los soldados portan fusil
Remington calibre 11mm. A los costados de los
mismos, podemos apreciar las primeras plantaciones
comerciales de pinos, que se iniciaron en el pais
a fines del siglo XIX.

Caballeria gaucha bajo el mando de Basilisio Saravia, el hermano colorado
de Aparicio Saravia.

Soldados del General Aparicio Saravia vadeando el Santa Lucía, antes
de la batalla de Fray Marcos. A la derecha de la foto, parte de la
División de lanceros de Mariano Saravia.
Podemos apreciar la diversidad de su armamento: Winchester, Mauser 71,
Escopetas, Remington, Mauser Daudeteau, facones, lanzas y sables.
Este era el único armamento con el que contaba el Ejército Revolucionario.

Saravia entrando en Minas, a su costado
Teniente Roquer y Capitán Galain de Paysandú.

Soldados de la Division Rio Negro del Ejército Nacional,
al mando del Coronel Andrada, armados de lanza, sable y carabina
camino a Masoller…
Muchos no volverán; agosto 1904.

1° de Caballeria.
Mansavillagra, 14 de enero 1904.

Club de los 21.
Amigos y compañeros de Gumersindo y Aparicio Saravia en la revolución
federalista brasileña:
Francisco Cabeda, Rafael Cabeda y General Yoca Tavares(el de la fusta).

Saravia con su esposa Cándida y su hijo menor.

Fuerzas revolucionarias nacionalistas de la caballeria de la
División Salto en las inmediaciones de la ciudad del mismo
nombre, julio de 1904.
La mayoria portan carabina Remington.

Rosario, Rio Grande do Sul, Brasil.
Fuerzas blancas compuestas por uruguayos y brasileños demostrando todo
su poder bélico y prontas para dirigirse a Rivera, marzo 1904.

Nacionalistas, en Rio Grande do Sul, esperando
el parque para transportarlo a Rivera, marzo 1904.

Molles, marzo 1903.
Lanceros nacionalistas. Se ignoran demas datos.

1° de Infanteria prontos para el combate. Antigua intendencia del Ejército.
Montevideo.

Francisco Fernandez.
Caído el 1° de enero de 1904, al intentar tomar-junto al comandante Villanueva- la
comisaría de Porvenir, en el departamento de Paysandú.

Coronel Gabino Valiente.
Jefe saravista, muerto en la batalla de Masoller, y según su hermano
Deseno, degollado al caer del caballo.

Infanteria de la “División Rio Negro” camino a Masoller, portando
fusil Remington. Agosto 1904.

Fuerzas revolucionarias nacionalistas de la División n°7 al mando de
José F. Gonzalez. Salto, agosto 1904.

Cambio de guardia en el cuartel “General Batlle”

Capitán Virgilio Sampognaro.
Comandante de la guerrilla de la extrema izquierda del Ejército legal
en la batalla de Masoller.

Agrimensor Carmelo Cabrera.
Jefe nacionalista de Rivera, a quien la junta de guerra de 1897 le
solicitó un estudio sobre lineas de comunicación en la republica, ferrocariles,
teléfonos y telégrafos.

Servidores muy bien montados. Paysandú invierno de 1904.

Comandante Juan Moreira y su ayudante, entregando las armas revolucionarias
despues que se firmara el 24 de setiembre de 1904, la paz de Aceguá(Cerro Largo).
Paysandú, 30 de setiembre 1904.

Nacionalistas en las inmediaciones de Montevideo, 1904.
Al frente podemos observar un soldado sentado con un fusil Remington.
El arma de la revolución.

Aparicio Saravia en Rivera.

Gauchos con divisas coloradas, pertenecientes a la división de
Basilisio Saravia, Montevideo 1904.

Personal de la “División Tacuarembó” realizando practicas de tiro con
fusil Mauser. Esta unidad estaba bajo las órdenes del Coronel
Máximo Artigas, Tacuarembó julio 1904.

1° y 6° de Cazadores.
Comandaba estas fuerzas respectivamente, el Coronel Guillermo Klinger,
el Teniente Coronel Juan Rodriguez, El Coronel Braulio Islas, El Coronel Cármelo
Ventura y el Teniente Coronel Luis Fabregat.

Servicio de rancho en la guardia nacional de Florida, 1904.

En un alto en el camino, peluqueros y barberos aprovechaban para
ganarse el día .

Sanidad del Ejército Nacional.

Regimiento n°3 de Caballería.
Esta unidad del Ejército Nacional con asiento en Rivera, actuó en
la batalla de Masoller bajo las órdenes de su jefe el Coronel
Guillermo Ruprecht.
En la toma fotográfica se puede apreciar -frente al Cabildo- el
momento de la recreación de la mencionada unidad.

Ejército Nacional pronto para entrar en combate.

Regimiento 5° de Caballería Ligera en ” Tres Arboles” 1899.
Esta unidad con asiento en el departamento de Tacuarambó formó junto
al Ejército Nacional en la batalla de Masoller, el 1° de setiembre de 1904.

1° de Caballería y sus acompañantes, a fines de mayo de 1904, después
del enfrentamiento de “Paso de los carros” del Olimar.
Al medio y al fondo de la foto, heridos en el enfrentamiento
son asistidos por la Cruz Roja.

Montevideo, 1° de Infanteria en formación, al fondo el legendario
Café “Al Tupi Namba”.

Jefes e integrantes de la División Maldonado del Ejército del
General Aparicio Saravia.

Familia Navarrete de Durazno.
Todos murieron en Masoller.
Toma realizada en Rivera, marzo de 1904.

Nacionalistas fotografiados en marzo de 1904 en la ciudad de Rivera.
Bien vestidos y bien armados.

José Pablo Torcuato Batlle y Ordóñez y su padre el General
Lorenzo Batlle.

Postales tituladas “Héroes del Partido Nacional”, General Aparicio Saravia
héroe de 1897 y 1904, y Coronel Diego Lamas héroe de 1897.

General Aparicio Saravia y su esposa Cándida Diaz.

Gumersindo Saravia o Gomersindo Saraiva.
Conocido en Brasil -segun el historiador brasileño Ivo Caggiani- como
“O Napoleão dos Pampas”.

Jefes revolucionarios federalistas de 1893 en Brasil.
Arthur Maciel, Estacio Azambuya, Rivas, Brasil, Aparicio Saraiva,
Gumersindo Saraiva y Cicero Saraiva.

Saravia en 1897.

….”La herida es grave. La bala ha entrado por la cintura, ha atravesado un riñón y los
intestinos, y abierto una boca de salida en el abdomen”……
….”Queda instalado en una carreta y los medicos deliberan. Resuelven llevarlo a alguna
estancia. Precisamente no muy lejos de allí, a dos leguas, en territorio brasileño, tiene
su campo la madre de João Francisco. Nada mejor para el herido. Numerosos soldados quieren
verlo. Pero en seguida parten, en una carreta”….
….”Aparicio Saravia sigue muy grave. Tiene fiebre alta. Sus buenos momentos son escasos.
En uno de ellos lo visita el Capellán que se queda un cuarto de hora con él”…..
….”El 6 se declara una bronconeumonia”….
….”El 10, a las 5 de la madrugada llega otro medico. El enfermo, que se siente muy mal
dice: “No sé qué podrán hacer; yo me voy para el campo santo”. Agrega con un vislumbre de
esperanza: “Me entrego a ustedes y a Dios”. Y al ayudante, que, por no creerlo demasiado
grave, le ha pedido permiso para ir a dormir un rato, le contesta: “Tenga paciencia, esto
terminará pronto”. Y tal vez sintiendo que la agonía se acerca, le ruega, casi sin voz:
“No me suelte la mano hasta que muera. Después, sigo viaje. Ya estoy pasando la frontera.
Siento que me llega un dolor en el corazón”…. …. “….”Y a la una y media de la tarde,
abandona este mundo el gran espíritu de Aparicio Saravia. Velan el cadaver en la misma
pieza. Lo han cubierto con una bandera de seda que le bordaron las damas de Melo. Con esa
bandera de la patria lo amortajaron, cumpliendo su voluntad de que ella le acompañara en
el ataúd. Al otro dia, bajo el bello sol primaveral, parte el cortejo hacia el campo santo..”
….”Ha muerto el gaucho de la libertad, el gran caudillo de los orientales. Ha emprendido
el Aguila Blanca su sereno vuelo hacia Dios….”

Manuel Gálvez
“Vida de Aparicio Saravia”

Homenaje realizado al General Aparicio Saravia en la Iglesia Matriz
de Sant´Ana do Livramento(Rio Grande do Sul), en el 30° aniversario de
su muerte.

Soldados uruguayos y brasileños, hombres con divisas blancas y coloradas,
federalistas y republicanos, a la espera del pasaje de los restos del
General Aparicio Saravia. La urna funeraria cubierta por una bandera
uruguaya y otra brasileña es escoltada por 500 gauchos lanceros a
caballo; servidores, amigos y compañeros de 1893, 1897 y 1904. De todos
los departamentos salieron delegaciones. De todo Rio Grande recibe
homenajes.
Los restos del General retornan al pais entre recuerdos, tristezas,
lloros, lágrimas, alegría y emoción.
Lo velan en Rivera, lo homenajean en Sant´Ana do Livramento, miles
quieren ver y tocar la urna.
Lo conducen a Montevideo, multitudes esperan su pasaje, kilometros
enteros de vias férreas cubiertas de rosas blancas.
El General, el “Aguila Blanca” retorna a su patria.

….”Una extraña fatalidad parece cernirse sobre esa batalla; (Masoller), primero van cayendo,
uno tras otro, los mejores jefes saravistas: el desconcierto cunde en los escuadrones
revolucionarios; luego cae, herido por misteriosa bala, el propio Saravia. Caído el caudillo,
el pánico y la consternación se producen en la masa guerrera; no solo se ha perdido una batalla:
todo se ha perdido. La muerte de Aparicio Saravia es una escena de tragedia antigua, de
profunda fuerza emocional y portentoso colorido. Con él desaparece el último caudillo gaucho,
árbitro e ídolo de las masas blancas, en quien estaba puesta la fé de su partido.
Su silueta de recio hombre de campo, con el poncho blanco recorriendo las lineas al galope de
su tordillo de guerra, es de efecto eléctrico para la masa; después de su muerte, el poncho
blanco flota como un simbólico sudario en la evocación de aquel crepúsculo.
Caído Saravia, fué como si a todos les troncharan los brazos; se cayeron las armas de la manos;
en medio de un silencio espantoso las bocas no se abrían sino para desesperadas imprecaciones;
todos los ojos estaban nublados en lágrimas. Muchos no podían creer; y aún veinte años
después habia blancos que decían de él como se decía de Facundo:
“No, él no ha muerto: volverá.”….”

Alberto Zum Felde
“Proceso histórico del Uruguay”

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Agradecemos a las siguientes Instituciones y Empresas su incondicional apoyo

en la confección y publicación de esta obra:

– JUNTA DEPARTAMENTAL DE RIVERA – COLONVADE S.A.

– INTENDENCIA MUNICIPAL DE RIVERA – COMPAÑIA INDUSTRIAL DE TABACOS MONTE PAZ S.A.

Bonos colaboración con el tesoro del Partido Nacional.

El Ejército del Sur en 1904, óleo sobre tela del artista plástico
uruguayo Casso Molinari.

www.museosinfronteras.com – e-mail: [email protected]